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Friday, October 03, 2008

La crisis y el proteccionismo estatal

Finalmente se aprobó la gigantesca disposición adicional de fondos para el rescate del sistema financiero, con ciertas modificaciones al proyecto original. El miedo ganó a los políticos, el mismo miedo que siempre se utiliza para lograr que las personas acepten perder libertades. El mismo miedo que ganó a los norteamericanos para apoyar la guerra en irak, y las violaciones a su privacidad.

La depresión económica va a seguir su marcha como ha seguido hasta ahora a pesar de todos los recortes de tasas de interés. Simplemente porque no atacan el origen del problema. Y no sólo no lo atacan, sino que lo alimentan: más liquidez para los bancos que hacen mal las cosas, no hace más que tragarse lo emitido o lo ahorrado y terminar en inflación. Por eso que a corto plazo tienen efectos positivos o al menos de freno, pero a mediano o largo plazo la contracción de crédito llega otra vez.

En el caso de la reducción de las tasas de interés, no existe un capital real transferido al sistema financiero, porque no existe de por medio más que emisión de dinero fiduciario. Por eso es que la reducción de las tasas de interés crea la ilusión de mayor capital disponible, y realimenta el consumo de capital que finalmente termina en recesión. Y cuanto más bajas las tasas de interés, mayor se alimenta esta ilusión y más catastróficas son las consecuencias. Y los hechos en todos estos meses han corroborado este fenómeno. A pesar de la drástica reducción de las tasas de interés y todas las promesas de los directores de la FED, la crisis ha llegado, y con más fuerza y saña.

A diferencia de esto, en el caso que fue aprobado hoy, lo que se pretende es una transferencia de capital real, proveniente del ahorro de los contribuyentes para capitalizar algunas de las entidades en problemas, nacionalizándolas parcial o totalmente.

Este mecanismo no da la ilusión de mayor capital disponible, pero nos confirma que el consumo de capital ha sido real, puesto que en caso contrario la transferencia no hubiera sido necesaria. Tiene una objeción moral, aunque si es positivo o negativo depende del cristal con que se lo mire, que es la transferencia de capital desde los contribuyentes al sistema financiero.

Sin embargo, si el resultado no fuera más que la transferencia, la discusión se limitaría a una cuestión ideológica. Pero el problema no es este. El problema es, y aunque lo ignoren los partidarios del rescate, que, al igual que con el recorte de las tasas de interés, se están subsidiando las prácticas equivocadas del sistema financiero. Y con esto no se logra otra cosa que mantener las malas prácticas en lugar de depurarlas, para que en el futuro vuelva a ocurrir lo mismo una y otra vez y el capital del rescate desaparezca.

Por eso siempre hay que repetir que el problema de las crisis cíclicas no es la desregulación, sino al contrario, el intervencionismo estatal que subsidia y protege las malas prácticas financieras. De hecho, estas prácticas resultan rentables sólo porque el estado las proteje.

El sistema financiero mundial ha evolucionado mucho y se ha diversificado exponencialmente. Como todo lo creado por el ser humano, en el mercado hay acciones ineficientes, que generan pérdidas, y acciones eficientes, que generan ganancias. Sin intervención del estado, las acciones ineficientes son depuradas y reemplazadas rápidamente por las eficientes. Pero cuando el estado interviene, sólo lo hace para proteger las acciones ineficientes, se generan enormes pérdidas, y suceden estas crisis que todos pagamos donde las fallas del mercado son generalizadas.

Es que las intervenciones del estado no permiten que el mercado se depure. Entonces se generan burbujas que crecen, malos negocios que en lugar de desaparecer se reproducen porque son solventados por el estado, hasta que las pérdidas se hacen tan grandes que el sistema colapsa.

Por eso es que, por más que el discurso dominante afirme y reafirme que las crisis son consecuencia de las fallas del mercado y la ausencia de regulaciones, muy al contrario, estas crisis son verdaderas crisis del estatismo. Y cada rescate, sea por medio de recapitalización con fondos fiscales, recortes de tasas de interés del banco central, o como sea, no es más que la gestación de la próxima crisis.

5 comments:

  1. "El camino está libre -dijo-. Volveremos al mundo.
    Y levantando la mano sobre la desolada Tierra, trazó en el espacio el signo del dólar."
    Saludos!
    La Rana René.

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  2. pero estas no son simples acciones ineficientes donde almacen don manolo cierra, los tipos tienen el sartén por el mango y se aseguraron el juego, seguro dijeron "si caemos, nos llevamos a todos" y ese caemos es relativo porque seguro ellos no la van a sufrir, se armaron el juego para ellos, ¿cómo se arregla entonces? y a ver si entendí bien, tampoco se trata de acciones eficientes y otras ineficientes, se trata de ganar, es una competencia donde gano si pierde alguien, y cuantos mas "gané" acumule, a mas hice caer, y mas grande es mi porción de mercado, por lo tanto este asunto tiene si o si dos caras, no puedo dejar de pensar en la contracara de esta crisis, ¿muchos están perdiendo de golpe? pues algunos seguro se la están llevando toda...... ¿o no?

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  3. Describilas como quieras esas prácticas. Es irrelevante la forma que tomen. Pero si están mal, ¿por qué el estado las protege?

    Y sí, son prácticas ineficientes porque generan pérdidas. En caso contrario, no sería necesario salvarlas con préstamos del banco central a tasas reducidas o con subsidios. ¿No te parece?

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  4. si, nose, estoy tratando de entender todo esto con muy muy escaso conocimiento del tema, que se yo, el estado tiene esa cualidad, es capaz de enzartar a todo un pueblo y generar dependencia, hacerle creer que es el salvador y que era necesario para la seguridad de todos, total si es una acción ineficiente o no no importa porque el estado no tiene nada, lo que tiene es según su habilidad de hacerle apretar los cinturones a la gente sacandoles mas de lo que les saca...

    y esas prácticas generan pérdidas pero ¿donde, a quienes? ¿no se supone que si en un lado se pierde en otro se gana? ¿en economía se cumple "nada se pierde todo se transorma"?

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  5. «y esas prácticas generan pérdidas pero ¿donde, a quienes? ¿no se supone que si en un lado se pierde en otro se gana? ¿en economía se cumple "nada se pierde todo se transorma"?»

    En economía no hay reglas en ese sentido. Todo depende de qué clases de acciones estemos hablando. Hay acciones que generan ganancias a unos y pérdidas a otros. Hay acciones que generan pérdidas a todos, y hay acciones que generan ganancias a todos.

    Por una cuestión de sustentabilidad las acciones que generan pérdidas no duran mucho. Excepto si el estado las alimenta por medio de subsidios o expansión de crédito artificial. Ambos métodos son una forma de transferir capital desde proyectos rentables a proyectos que no lo son.

    Y de ahí las crisis económicas.

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